Las barras de acero estiradas en frío tienen varias ventajas sobre las barras de acero laminadas en caliente:

1. Propiedades mecánicas mejoradas: las barras de acero estirado en frío tienen un acabado superficial más suave, lo que conduce a propiedades mecánicas mejoradas, como una mayor resistencia a la tracción y al rendimiento, mejor dureza superficial y precisión dimensional mejorada.

2. Mejor calidad superficial: las barras de acero estirado en frío tienen un acabado superficial más suave y uniforme, lo que las hace ideales para usar en aplicaciones donde la apariencia es importante.

3. Rentable: las barras de acero estiradas en frío son menos costosas que las barras de acero laminadas en caliente, lo que las convierte en una opción rentable para muchas aplicaciones.

4. Mayor durabilidad: el proceso de estirado en frío da como resultado una estructura de grano más densa y uniforme, lo que aumenta la durabilidad y la resistencia a la fatiga del acero.